Prosa del gnomo
20241112
El gnomo me dijo una vez que le tenía que dar un pelo de la coronilla. Cuando lo negué, me dijo, "Puedo tener un pelo hoy o todo en décadas." Desde entonces he perdido todo ese pelo, y oigo al gnomo reír cada día.
20241119
Cuando llegué al teatro, el gnomo se estaba sentando en mi mesa preferida. Me ofreció una silla y me pidió un café y un agua mineral, como me pido siempre. Me dijo que llovería todo el día. Quise leer hasta que llegaras, pero no quise ser grosero, así que hablamos de las cosas que toda la gente dice para decir nada.
20241120
El gnomo dijo: "Nieva". Miré fuera y no nevaba. Contesté: "No hay ninguna nube, el cielo está azul y el sol brilla". El gnomo dijo: "Nevó ayer". Me acordé de que llovió, así que lo negué: "Anduve en la lluvia ayer, mi abrigo estaba mojado". El gnomo predijo: "Nevará mañana". Pensé en alto: "Veremos, veremos".
20241126
Me quise despertar, pero el gnomo quiso dormir otra hora. El reloj de mi celular cantó, y canté con él, pero el gnomo susurró para pedir silencio, rodó al otro lado y siguió durmiendo. Su ronquido era más ruidoso que el celular y yo, y nosotros dos nos despertamos. Herví agua para café, escuché música con mi celular, y el gnomo roncó y roncó.
20241210
Hace varios días el gnomo ha desaparecido. Imagino que se fue a otro lugar para diciembre y Fin de Año. Quizá esté con otros gnomos en el Polo Norte para hacer juegos para los niños y las niñas del mundo, que están esperando sus regalos de Navidad. En la nieve fuera de la fábrica los gnomos hacen muñecos de nieve con sombreros y zanahorias como nariz.
20241214
En otra sala, el gnomo habló con el espectro de algunas cosas extrañas que sigo haciendo. Ambos se rieron de que, por ejemplo, me senté aquí, toqué algo con mis dedos y suspiré a veces, o hablé con nadie o quizá conmigo. No entendieron mis palabras casi susurradas, formulaciones para comentarios a mis estudiantes sobre los ensayos que estaba corrigiendo.
20250211
El gnomo camina por el campo y mira su celular nuevo, que roba del espectro. Pero el celular mira también al gnomo.
20250307
Fui con el gnomo al museo y vimos un autoretrato de una pintora con una boina roja. El gnomo gritó: “¡La conocí! ¡Y me robó esta boina hace ciento once años!” Se giró hacia mi y añadió: “No escuchaste que dije algo sobre mi edad.” Me hipnotizó con su mirada, y olvidé sus palabras hasta que muchos años después soñé sobre nuestra visita al museo.
20250523
El gnomo miró en el cielo azul y dijo: "Creo que está lloviendo, y hoy olvidé mi paraguas." Cerca de él, miré en el cielo azul y dije: "Pero el cielo está descubierto y el aire es seco." El gnomo rio y gritó: "¿No puedes ver la tempestad? ¿No puedes sentir la humedad del aire? ¿No puedes escuchar el viento?" Lo miré como si estuviera loco, y me miró también como si yo estuviera loco. Nos miramos en silencio mientras el sol se ponía. Pero sin su paraguas, la lluvia invisible y silenciosa mojó al gnomo y extinguió la llama de su pipa.
20250723
El gnomo no quiso ver el partido de fútbol entre España y Alemania, así que trajo su boli y dibujó bigotes y barbas sobre las caras de las jugadoras en una foto de los dos equipos. "¿Por qué no vemos una película de Navidad en Netflix? Quiero ver una historia de una mujer de la ciudad que vuelve a su pueblo y encuentra el significado verdadero de la vida y de la Navidad." ¡No pude creer sus palabras! "Pero gnomo, es julio. ¡Quedan todavía cinco meses para la Navidad! Y las jugadoras ofrecen un significado importante para la vida y para las niñas." El gnomo se calló y dibujó otro bigote.
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